domingo, 21 de febrero de 2010

i saphanim


Un conejo de campo se ensaña con una hoja en un cultivo de cereal. En la actualidad, debido a las malas prácticas agrícolas que se llevan a cabo de forma inconsciente por la mayoría de los agricultores del sur de España, lo que provoca una falta de vegetación en las lindes de los cultivos, miles de conejos no encuentran qué echarse a la boca, optando por comerse la única masa herbácea de su altura que le hemos dejado los representantes de nuestra especie: los cultivos. Los conejos ocasionan grandes daños a las cosechas en algunas regiones de nuestro país, no obstante su papel ecológico es importantísimo, ya que su carne compensa con creces el esfuerzo que supone a sus depredadores el hecho de cazarlos.